viernes, octubre 7
LA HIJA DEL PRESIDENTE

"She, who always seems so happy in a crowd
Whose eyes can be so private and so proud
May come to me from shadows of the past "
(She- Elvis Costello)



Esta vez, tocó grabación en Chaclacayo, fui con David, quien tuvo que cargar la cámara que pesaba dos veces más que yo. Su esmirriado cuerpo parecía doblarse en dos sobretodo en las calles que van en subida. Fuimos en busca de Laura Sánchez Cerro, la hija del ex presidente, pues tenía una entrevista con nosotros para ser usada en el documental que preparamos. Una mujer dulce, de baja estatura, con la alegría honesta de alguien que, de verdad, se alegra de que la visiten, aunque sean dos periodistas dispuestos a hurgar en su pasado. Con ella conversamos en entrevista oficial unos veinte minutos bajo un sol chaclacayino que se hace extrañar en la, ahora nublada Lima, y ante la atenta mirada de los dos celosos guardianes ubicados en su jardín, Dante y su amigo, dos blanquecinos cráneos que su esposo geólogo trajo un día para que le cuiden la casa.

Doña Laura tenía 4 años cuando Sánchez Cerro fue asesinado saliendo del hipódromo de Santa Beatriz. En su álbum no guarda ni una sola foto con su padre, en cambio aparecen muchos señorones encopetados posando con ella en un día de playa o al borde la piscina de los Prado.
“El fotógrafo me dijo que nunca había visto una novia tan sonriente como yo” me dice mientras mira las fotos de su matrimonio, y es cierto, luce una gigantesca sonrisa que le hacía la competencia al blanco de su vestido. Yel novio, que ahora descansa algunos metros bajo tierra, era un danés de grandes ojos celestes que la conquistó a punta de detalles y sobretodo, porque nunca le importó que ella no supiera cocinar. (¿Porque no hay mas hombres así!?).

La entrevista ya había terminado y ella seguía contándonos historias de su matrimonio. “No saben cuanto extraño todo” nos dice y le creemos cuando se queda durante un largo rato mirando sus propias fotos. Si tuviera que ponerle un adjetivo a un personaje como Laura Sánchez Cerro sería: Entrañable. La hora transcurría y ya debíamos irnos, aunque ella no se tomaba un respiro entre anécdota y anécdota, parecía querer retenernos y no volver a la costumbre de quedarse sola. Pero tuvimos que despedirnos mientras ella insistía en que le preguntara a mi mama si mi nombre, Valeria, se debía a la protagonista de la novela que estaba de moda hace 25 años, y a David, le recordaba que le ganó a Goliat tal vez, para darle fuerzas mientras cargaba su pesada cámara sintiéndose un “mata gigantes”.

David y yo bajamos la calle para regresar a la oficina, satisfechos con el material. Hoy, nos dimos cuenta que las imágenes estaban azules por una falla con el white balance. Material inutilizable. Por culpa de David tendremos que regresar, sabemos que Doña Laura nos recibirá nuevamente con la misma amabilidad y la predisposición de traer nuevamente al presente los recuerdos de sus tiempos más felices. Y todo por el error de David!!
Lee aquí el capítulo anterior...
 
posted by Textualmente activa at 10:16 a. m. | Permalink |


1 Comments:


  • At 5:19 p. m., Anonymous Anónimo

    La Sra Laura me hacia movilidad hacia el colegio primario Los Cedros, que quedaba a 2 casas de la suya, a principios de los años 80. Era una persona de un caracter bastante fuerte, pero bueno sería por lo insoportable que eramos de niños.
    Espero que aún se encuentre bien

     

BlogsPeru.com Peru Blogs
Layout design by LIVITY